Según la Organización Internacional del trabajo (ILO) define como trabajo infantil “como todo trabajo que priva a los niños de su niñez, su potencial y su dignidad, y que es perjudicial para su desarrollo físico y psicológico”. En Guatemala el trabajo infantil es realizado por niños y niñas entre las edades de 7 a 14 años los cuales no reciben educación por los factores demográficos, económicos incluso culturales.
Guatemala es un país lleno de corrupción, es por esto que no se atienden las necesidades de los pobladores, afectando de gran manera al nivel medio pero afectando de manera colosal al nivel bajo. La corrupción no permite el desarrollo integral de los guatemaltecos creando así desempleo y los empleos existentes ofrecen muy poca remuneración por lo que los habitantes de diversas áreas del país deben de buscar una manera para obtener ingresos económicos.
Bajo la desesperación al no conseguir trabajo muchos padres optan por enviar a sus hijos a trabajar, al momento que los menores inician en la vida laboral son obligados a dejar su niñez por un lado para poder ganar dinero y así poder llevar un plato de comida a sus hogares. Muchas veces los mismos padres y los menores trabajan de manera conjunta pero en otras ocasiones los menores son enviados solos a realizar una diversidad de trabajos.
Guatemala se ha deshumanizado, para muchas personas resulta de manera normal y cotidiana ver a niños trabajando en semáforos, vendiendo en el transporte público y vías congestionadas, en un mercado o incluso realizando trabajos domésticos. Esto no debería ser visto como normal ya que los niños deberían de estudiar para mejorar su calidad de vida y no ser explotados laboralmente para poder alimentar a su familia.
La mayoría de niños y niñas trabajan en condiciones de riesgo manipulando herramientas peligrosas, sustancias químicas o pólvora en las coheterías o cargando pesos excesivos a pesar de esto trae consecuencias y las más importante es que causa el desinterés de los niños y niñas de las escuelas y esto lleva a citar lo siguiente: “Al obstaculizar la oportunidad de recibir educación, el trabajo infantil transmite a pobreza de una generación a otra (Berganza, 2004).